La última etapa. Sencilla de realizar, grandes planicies y cuesta abajo, recorreremos fácilmente los 46 kilómetros de que consta. Si, 46 desde la puerta del hostal donde dormimos en Medellín hasta la puerta del Albergue de Peregrinos de Mérida. Las distancias indicadas en las otras webs no son correctas, la más aproximada es la web de la Asociación de Amigos del Camino, pero no contempla bien la distancia inicial hasta Santa Amalia ni el recorrido por dentro de la ciudad de Mérida.

Pasamos la noche en el Hostal "Río" de Medellín. Con vistas al puente de los Austrias y la vega del Guadiana. Sin embargo para los desayunos tendremos que ir a otro sitio ya que no abren hasta las 10.

En el centro del pueblo, a mitad de la calle que lo atraviesa (por la que llegamos el día anterior) tenemos otro mesón restaurante que abre a primera hora de la mañana. Os recomendamos pedir la tostada de tomate, jamón ibérico y aceite de oliva. Increíble. Merece la pena. Unido a un café con leche y un zumo de naranja natural ya podemos emprender el camino.

Saldremos desde la puerta del hostal, cruzando el Guadiana por el puente de los Austrias, maravillosa obra de ingeniería que se ha conservado intacta hasta nuestros días. Como siempre las flechas amarillas nos guiarán sin demasiados problemas.

Nada más acabar el puente cruzamos al camino de tierra que sale a nuestra izquierda. Lo seguiremos durante aproximadamente 1 km hasta llegar a la carretera de Yelbes, a la cual nos incorporamos en dirección a ese pueblo. Aproximadamente otro km más en esa carretera y la abandonamos por una pista agrícola en gran parte asfaltada que sale a nuestra derecha.

Proseguiremos por esta pista a buena velocidad gracias al trazado llano y en relativo buen estado de este camino agrícola. No la abandonaremos en ningún caso hasta su final, otra vez en una carretera junto a unas naves de industrias. Cogeremos esa carretera hacia nuestra derecha, dejando a la izquierda esas naves (entre ellas una industria tomatera) y proseguiremos hasta llegar a Santa Amalia, pasando por una gasolinera y desembocando en la Nacional 430.

En este punto es posible que no encontramos las siguientes flechas. Veremos un cartel que pone "Yelbes 5" que no seguiremos, pues nos haría retroceder. Veremos en la nacional que a nuestra izquierda hay un puentecillo o pasarela peatonal de color verde. Tendremos que ir por el arcén de esa nacional con mucho cuidado, ya que soporta bastante tráfico rodado. Los ciclistas deberán cruzar al otro lado, ojo en ese cruce. Veremos al pasar por debajo de dicha pasarela verde que hay una flecha en el pilar derecho. Hasta aquí llevaremos casi 9 kilómetros recorridos.

Dejaremos Santa Amalia siguiendo la nacional otros 9 kilómetros por el arcén, tras los cuales llegaremos a Torrefresneda, al cual entraremos por una vía de servicio que nos obligará a cruzar la nacional y salir definitivamente de ella.

Torrefresneda parece un pueblo de repoblación, muy parecido a alguno que cruzamos en la Ruta de la Plata. La torre de su iglesia es de idéntica construcción. Quedan casi 9 kilómetros hasta San Pedro de Mérida.

Atravesaremos la población sin llegar a entrar en ella, por la carretera que nos ha traido. Podremos ver algún bar donde hacer un alto si lo necesitamos. Seguimos todo recto hasta salir de la población por un camino indicado como "camino agrícola". Asfaltado casi en su totalidad (falta algún tramito). Este camino nos llevará directamente hasta Mérida. No tendremos que salirnos de él.

Este camino va paralelo a la autovía, a la que cruza en varias ocasiones. Deberemos estar atentos a las flechas. Al principio dejaremos la autovía a nuestra derecha, luego a la izquierda cruzándola por debajo de la misma, luego a la izquierda (camino recién asfaltado) cruzándola por arriba y otra vez a la derecha para finalmente cruzar por debajo de la autovía y dejarla de nuevo a la izquierda. En este punto llegaremos a un cruce del camino agrícola (o vía de servicio) con la vieja carretera. Ambos caminos llevan a San Pedro de Mérida, nosotros utilizamos el camino agrícola que nos deja en la salida de la autovía, junto a la estación de servicio, restaurante y hostal Juan Porro.

Entraremos al pueblo siguiendo las flechas y buscando el cuartel de la guardia civil. Giraremos a la izquierda por una calle para pasar por delante del cuartel y seguir recto hasta salir del pueblo.

Tomaremos de nuevo el camino agrícola asfaltado y NO seguiremos las indicaciones de la web de mundicamino que hablan de cruzar el vertedero e ir por un camino siguiendo las vallas. Si lo hacemos nos cansaremos el doble, ya que está en mal estado por el tránsito de tractores además de correr el riesgo de perdernos por no estar señalizado en ningún momento. Faltan 6,4 hasta trujillanos.

Lo correcto es el camino agrícola o vía de servicio. Aunque hay pocas flechas amarillas, son las suficientes para no perderse. Con agradables cuesta abajo alcanzaremos un buen ritmo hacia Trujillanos, pueblo que divisaremos rápidamente.

Atravesaremos el pueblo bordeando su industria y sin entra en el. Disponemos de hostal y bares por si lo necesitamos. Saldremos por el mismo camino agrícola que pasará a ser un camino de tierra. Deberemos estar atentos si vamos rápido porque cruzaremos por debajo de la autovía, y si no estamos atentos nos lo saltaremos. Este cruce está en mal estado por la vegetación y la basura. Pasa un pequeño arroyo por allí.
Al otro lado retomamos el asfalto que seguiremos hasta cruzarnos con una pista de tierra en buen estado que sale a nuestra izquierda. Está muy bien señalado. Cogemos esta pista que nos llevará directos a Mérida en una entrada triunfal.

Ya dentro de la ciudad nosotros proseguimos hasta el circo romano y de allí, siguiendo el sentido de la circulación, dejamos el edificio "ocaso" a nuestra izquierda, para llegar hasta el río, y pasando las rotondas y dejando el acueducto de Los Milagros a la derecha encontraremos el Albergue entre el puente de hierro del ferrocarril y el puente de lusitania.

Gracias a la amabilidad de los hospederos podremos ducharnos y cambiarnos y visitar Mérida de una forma más cómoda.

Impresionante ciudad romana, con u teatro y anfiteatro dignos de admiración.

Merida marzo 2008

Merida marzo 2008



Para comer recomendamos el Mesón "El serranito". En la calle Suarez Somontes, que empieza cerca del teatro, dejando la parada del trenecito turístico a nuestra derecha.

Especialidades en ibéricos y tapas, así como las gambas, las paellas y el arroz con bogavante. Las paellas y el arroz con bogavante de encargo, y los preparan al punto exacto, así que tendremos que esperar unos minutos hasta que nos lo saquen, pero se ameniza con unas tapas.

Restaurante El Serranito, marzo 2008

Nosotros degustamos el impresionante arroz con bogavante, de los mejores. La amabilidad de Pepe y su familia contribuye a una agradable comida. El sitio es pequeñito y se llena, así que espabilar.

FIN DE VIAJE.

Circo de Mérida, Marzo 2008

Teatro de Mérida, marzo 2008